Hacemos las cosas por compromiso y no por que en realidad queremos hacerlas, muchas veces no hacemos cosas que queremos por diferentes razones: miedo o compromiso por ejemplo, y aveces hacemos cosas que no queremos por las mismas razones.
Antes de tomar decisiones nos encontramos pensando que pensara el projimo de ésta, nos sentimos avergonzados de algunas cosas y las guardamos solo para nosotros mismos. No queremos ser rechazados nunca, pero no se puede complacer a todos; siempre habra alguien con inconformidad y no hay nada que podamos hacer.
Pero hay que tener en cuenta que cada dia que vivimos es la oportunidad de adquirir mayores conocimientos.
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